viernes, 22 de junio de 2012

"Los calzoncillos de Herodoto", de Magnus & Napalm

Los calzoncillos de Herodoto es el nuevo proyecto de Magnus (Martín Perez) como guionista, acompañado en este caso por el arte de Napalm (Martín Pouso), que había colaborado con Santiago González en la historieta breve "Adiós", publicada en GAS3K.3 (ver aquí mi reseña). Al considerar el trabajo de Magnus llama la atención su productividad (en un nivel irregular pero de calidad indudablemente creciente) y la variedad de géneros o subgéneros que intenta abordar (algunos con mayor éxito que otros; quizá su fuerte sea la ciencia ficción). Algunos ejemplos: el anecdotario en plan autobiográfico de Mi vida sin un jetpack, serie de tiras de tres viñetas cada una dedicadas a ilustrar un momento puntual en la vida del autor y un proyecto que, entrega a entrega, no siempre resulta satisfactorio pero que, cabe argumentar, gana espesor por la acumulación (hasta la fecha van 25 tiras) y por los elementos parahistorietísticos aportados a cada publicación, canciones, referencias o segmentos de prosa que aportan a la anécdota presentada (lo que también puede pensarse como un punto débil: en algunos casos, sin la prosa aclaratoria el impacto en el lector de la tira se derrumba); la ciencia ficción con arco narrativo de largo alcance propuesta desde el ciclo Imperiex Terra y en otros relatos breves; y la narrativa de fantasía o de hechos sobrenaturales del ciclo Grimorio del plata, que, ilustrada por el dibujante argentino Nahus (Nahuel Silva Barrios), es probablemente el mejor esfuerzo del guionista hasta la fecha. La nueva serie Los calzoncillos de Herodoto se instala en un registro humorístico del comic histórico, género que podría presentarse como el hijo predilecto del cómic nacional desde los trabajos de Rodolfo Santullo (Acto de guerra), Martín Bentancor (Cardal) y Federico Murro (Historiatas), entre otros creadores. El abordaje de Magnus en Los calzoncillos... prescinde de la historia nacional como inspiración única y, al menos desde su primera entrega, aborda la historia de España. El tratamiento narrativo es similar al de Mi vida sin un jetpack (salvo por la extensión, por supuesto) en tanto en esta primera entrega lo narrado se incorpora a los límites de una anécdota concreta, el affaire del rey Felipe IV con la Duquesa de Albuquerque. La fuente para esta narrativa es una de las rutinas del escritor y comunicador radial Alejandro Dolina, de la que surge no sólo el "contenido" narrativo de la tira sino, en cierto modo, también su actitud, su manera de pararse ante los hechos históricos. De hecho, esa actitud, como es expuesta por Magnus en el prólogo a la primera entrega de la serie, implica adaptar "anécdotas históricas (y probablemente también alguna mitológica) a historietas" de "humor histórico", tomando como referencia el trabajo de Dolina y también el de Kate Beaton, que claramente aportó a Magnus una manera de crear humor gráfico histórico con desenfado y cierto espíritu iconoclasta (ver, por ejemplo, su relato sobre Marcel Duchamp). También advierte el autor en el prólogo que la fidelidad a la "historia" -a la historia "oficial", de hecho- no necesariamente será mantenida, y señala que otras versiones de la anécdota presentada en la primera entrega de la serie "tenían un desarrollo (y un final) muy distinto". En cualquie caso, la noción de "historia semidesnuda" -invocada desde la portada- parecería referir a la pretensión de trabajar sobre hechos presentados como los entretelones de la historia  o, quizá, como ciertos momentos "descuidados" por la narración histórica oficial. En ese sentido, la búsqueda de la anécdota como eje del relato, el rescate del lugar de la anécdota en la narración de hechos históricos y la incorporación del humor acercan a Los calzoncillos de Herodoto a Historiatas, la ya mencionada obra de Federico Murro.
La instalación del cómic histórico en el mundo de la historieta nacional crece y se diversifica, incorporando humor, parodia e intervención sobre el discurso histórico oficial. Esta nueva serie de Magnus es un buen ejempo de ello, pero también cabe señalar el divertido enfoque pseudo-ucrónico de Rodolfo Santullo & Guillermo Hansz en El club de los ilustres, que incorpora personajes históricos uruguayos en un contexto de ficción de aventura e intriga con referencias al clásico La liga de caballeros extraordinarios, de Alan Moore y Kevin O'Neill.
El éxito de las ficciones de Magnus suele estar inextricablemente ligado al desempeño de sus dibujantes; así, Nahus y, un poco en menor medida, Crizam (Christian Zamora), colaboraron a que Grimorio del plata e Imperiex Terra fuesen los mejores relatos de GAS3K.3. En el caso de Los calzoncillos..., el trabajo de Napalm se convierte en uno de los puntos de mayor interés de la historieta. Su arte, además, es el complemento perfecto para los propósitos humorísticos del guionista, y colabora en lograr que Los calzoncillos de Herodoto -al menos en esta primera entrega- se presente como un relato divertido y bien narrado, con momentos especialmente logrados en cuanto a dinámica e composición de las viñetas.

1 comentario:

  1. Muchas gracias, Ramiro, por tu reseña, y por tus palabras alentadoras (pero siempre objetivas) para con mi labor.

    Y si, Napalm se pasa con el arte; haciendo de mis crudos bocetos de pagina (que compartire luego) verdaderas obritas de arte en si misma; como pequeños cuadros.

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